** FÍSICOS INCREÍBLES VS CONVERSACIÓN INTELIGENTE

Mis brujas coinciden, en líneas generales, en que prefieren un físico que les llame la atención para poder continuar con el cortejo. Dicen que un tío les tiene que poner, les tiene que atraer con esa química loca que nos manda información al cerebro y nos pone en pie de guerra. Vale, que a nadie amarga un dulce, las cosas como son...

...pero yo, aunque suene melodramático y teatrero, prefiero una conversación inteligente. Siempre. Por ser una combinación en peligro de extinción, sobre todo. Por regla general, el día a día en el que nos embarcamos es de por sí tan difícil y nos consume tanta energía, que a la hora de preocuparnos por las cosas importantes ya no tenemos fuelle. Y nos limitamos a dejarnos llevar, a pasearnos por la superficie. Sin profundizar. Así que encontrar a alguien con quien una charla se convierta en un tesoro que llena y hace crecer, es un lujo. Un lujazo.


Bien es cierto que nos hemos acostumbrado a valorarnos vía físico, porque es la primera toma de contacto, la tarjeta de presentación. Y vivimos en una cultura donde eso prima por encima de otras muchas cosas importantes. Por eso hay que andar rápidos en transmitir, en resultar seductores antes de que el culo plano, los ojos pequeñitos, la nariz superlativa o las orejillas de gnomo centren toda la atención. También el sentido del humor es una buena alfombra, sobre todo en los hombres; gusta que nos hagan reir, con arte y sin groserías. Porfa.

Yo siempre he tenido un gusto peculiar para la vida en general y para los hombres en particular, eso es verdad; siempre he preferido a los menos guapos, a los que pasaban desapercibidos, a los que no hacían demasiado ruido. Igual por no tener que pelear en el barro con camiseta blanca... ;-DDD Ahora, con casi...taitantos, no sólo me encantaría un buena pelea medio en pelotillas sino que además me decanto por físicos especiales y diferentes, ciertamente (o eso creo); me gustan, por ejemplo -y al márgen de su condición sexual-, Luis Merlo, Tontxu, Mario Pestano, Manuel Martínez, (así que me acuerde de repente) y alguno que otro que no puedo confesar ;-DDDDD. Incluso al Sevilla puedo encontrarle su aquel (porque tiene encanto, es divertido, tiernote...). No soy ni de crepusculines, ni de Velencoso, ni del Duque, ni de Ronaldo, ni de Verdasco ni de Casillas. Y ahora que mento al rey de Roma... díganme ustedes, qué le ven -pero de verdad- a la Carbonero, aparte de unos ojos ( y ahórrense cierto comentario ordinario) espectaculares. Mírenla mejor, por favor, y sobre todo, escúchenla hablar cuando no tiene guión delante (eso sin tener en cuenta que no ha acabado la carrera de periodismo...aunque eso le puede pasar a cualquiera...¿no?).

Así que dar oportunidades -arriesgar, apostar, jugar...- es abrir una caja de sorpresas. Ya veremos qué hacemos después con el confetti... 

;-D

Mañana, mujeres de bandera.
Y de aperitivo, una de las mujeres más inteligentes e ilustrada que se pasea por la cultura de este pais.
Además de contar con una repertorio de canciones
que marcaron una época crucial...

...ay, los ochenta!