** PEDIR PERDÓN

...nos cuesta pedir perdón. Es uno de los ejercicios más complejos que procesamos los seres humanos en el marco de nuestras habilidades personales. Nos cuesta no sólo analizar nuestro comportamiento -a veces pecamos de poca autocrítica, por eso de que es mucho más sencillo culpar a los demás de los errores- sino, sobre todo, cuesta reconocer que nos hemos equivocado, que podíamos haberlo hecho de otra forma. El orgullo -necesario para la supervivencia, es verdad- siempre está ahí, siempre deja una estela, siempre ronda al corazón y a la mente. El orgullo -porque todos tenemos un puntito orgulloso- nos engatusa, nos arrincona, nos debilita incluso. El orgullo -autoestima, arrogancia, satisfaccion personal- nos ciega. Y nos hacemos daño. Es parte de la vida, del aprendizaje, del camino. Pero es que cuesta asumir los errores.

...yo aún tengo una espinita clavada en el corazón, uno de esos capítulos en la vida que no he cerrado. Me duele, sí, y me duele sobre todo, por no saber, por no entender en qué punto algo se resquebrajó y dejó paso a la nada. Será que yo no soy así, que prefiero hablar, que prefiero perdonar si hay algo que perdonar y olvidar si hay algo que olvidar. Pero siempre desde la armonía de la comunicación. Y del cariño. Desaparecer para no afrontar no es saludable, sólo enmascara...

...permitidme que desnude el alma, que llore una vez más, la ultima; permitidme abrir para poder cerrar del todo. Punto y final.

.....................

"¿Querido? Toni:
No sé si te sorprenderá que aún me acuerde de tí ni si te extrañará
que me tome tiempo para escribirte unas líneas. No sé en qué medida
me importa tu respuesta pero aquí estoy, aquí me tienes y aquí,
espero que de una vez por todas, voy a mostrarte los fantasmas
que se empeñan en rondarme el alma.

La decisión de desaparecer de mi vida fue algo que hoy aún no entiendo.
Sigo herida, es verdad. Quería escribirte esta carta desde hace tiempo;
me he sentado, he recordado, he llorado y he desistido tantas veces
como he encabezado la tristeza de mi corazón. Porque supongo que a ti
no te pasará lo mismo; hay personas que tienen la gracia de separar los
sentimientos sin remordimiento alguno. Yo no, claro. Para mí perder
tu amistad fue duro, doloroso y triste. Eras importante en mi vida; eras
un buen amigo, un buen tío y un monitor increíble. Me gustaba tu compañía,
tu sonrisa, tu forma de entender la vida. El tándem funcionaba hasta que
en algún momento decidiste que eso no valía nada. Decidiste que la opinión
de los demás era más importante que los afectos, decidiste que una duda
razonable era mejor que la certeza de todo lo vivido.

Cada cual es responsable de sus actos y de sus decisiones, sin duda; quise
entenderte, quise entender tu desdén, quise respetarte. Pero lo que no he podido
hacer es olvidarte. No te he apartado nunca de mis recuerdos y creo que tampoco
de mi corazón. NO he olvidado lo vivido, ni las risas, ni el tiempo juntos, ni tiempos
mejores. Tampoco he conocido a otro monitor como tú, habrías llegado muy muy lejos.

A esta alturas de la carta, me doy cuenta de que ni todas las palabras del mundo
pueden expresar la vehemencia de mis sentimientos; pero supongo que, al final,
el tiempo lo cura todo y que los afectos, por muy intensos que fueran, también acaban
por apagarse. Como una fogata de campamento.

Te he querido mucho, Toni, mucho y de verdad. Y en ese espacio que me dejaste
no pretendía que tu hicieras lo mismo, pero si me hubiera gustado que me permitieras
explicarme, si es que tenía algún delito por el que pagar. Tú, sin embargo, elegiste el
borrón y cuenta nueva. Por completo.

NO pretendo nada con esta carta, la verdad; imagino que te dará igual mi vida pero confío
que tengas, al menos, buen recuerdo de lo que vivimos, de lo que compartimos. Necesitaba
sacar mi pena y compartirla contigo; necesitaba un exorcismo porque, a estas alturas, deberías ya ser parte de mi historia. Y no de mi presente.

¿Sabes qué? que te echo de menos..."

....................


"Debe de haber un paraíso fiscal
lleno de calcetines desparejados,
emails que no llegaron,
paraguas olvidados
y perdones sin pedir".



BESOS,
cercanos,
íntimos,
moñas...
;-)))))))