Incluso teniendo cuidado de no cometer excesos, las navidades son fechas en las que es casi inevitable descontrolar la alimentación, en cantidad y en tipo, con más grasa e infnitas salsas ;-s Así que sin dejar que pase un día más, aquí os dejo unos consejillos que pueden resultarnos de utilidad para recalibrar el equilibrio de nuestro cuerpo. Recordemos aquello de mens sana... :-)
Ni qué decir tiene que un tierno masaje sensitivo hará las delicias de cualquier cuerpo y de toda alma. Os espero para retomar el pulso de este nuevo año que se nos presenta cargado de oportunidades y de sueños por cumplir.
¡Mil besos!
0.- Una buena hidratación. Debemos beber agua en la cantidad óptima (entre un litro y medio y dos litros) para rehidratar la piel por fuera y todos nuestros órganos por dentro, así como para eliminar las toxinas acumuladas.
1.-Desayuno
frugal.
Saltarse el desayuno es
siempre un error, también el día después de una cena opípara y
excesiva. El desayuno en estas semanas puede ser más frugal y suave,
pero no vale obviarlo. Sirve para reponer fuerzas y para que, al
sentarnos a comer, lo hagamos con un apetito normal y con menos
ansiedad. Lácteos, frutas, cereales, pan...
2.-Menú
liviano,
pero exquisito.
Deben combinarse alimentos hipocalóricos (hortalizas y verduras,
frutas, pescados...) con preparaciones sencillas y dar un toque
sofisticado a la receta tradicional: una salsa original, un alimento
exótico, una presentación sugerente...
3.-
Alimentos depurativos como
parte del menú. Estimulan los órganos depurativos (hígado,
riñones, intestino) y alivian las molestias por los excesos, como
pesadez de estómago, sensación de hinchazón o dolor de cabeza. Los
alimentos que tonifican el hígado son los vegetales de ligero sabor
amargo (escarola, endibias, alcachofa, cardo, berenjena, infusiones
de diente de león y cardo mariano), mientras que las verduras y las
frutas, como apio, espárragos, borraja, manzana o pera, activan la
acción depurativa del riñón.
4.-Alimentos
ricos en fibra ayudan
a aliviar el vientre hinchado. Una fruta en compota mezclada con
frutos secos y ciruelas pasas, un yogur con salvado, beber agua y un
largo paseo ayudan a este propósito.
5.-Un
yogur al día favorece
una mejor digestión.
6.-Ensalada
de entrante.
Los alimentos crudos son ricos en enzimas, que ayudan al organismo a
realizar una mejor digestión.
7.-Germinados en
la ensalada. Brotes
de soja, alfalfa, trigo o cebada contienen enzimas que contrarrestan
la pesadez..
8.-
Postres y cafés sin azúcar.
Más que optar por edulcorantes tipo sacarina, el consejo saludable
es acostumbrar el paladar a los sabores naturales de los alimentos,
incluido el ligero amargor del café y del té.
9.-
Caminar una hora al
día,
como mínimo, ayuda a mejorar la digestión y a que las calorías no
se acumulen en el organismo.
10.- No auto-castigarse. Lo pasado, pasado está. Si nos hemos excedido, apliquemos estos consejos y retomemos una alimentación saludable y equilibrada.
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