viernes, 28 de octubre de 2011

**REIVINDICANDO UN POCO DE LO SOCIAL...

Anteyer alguien me invitó a ver el reality "Granjero busca esposa". Confieso -y no sé muy bien si es bueno o malo- que solo había he visto algún capítulo asislado, cuando una madrileña errante me obligó a soportar tamaño experimento sociológico en ediciones anteriores.

Perdonadme si sóis fans. A mí me supera, lo siento.
Me puede el machismo recalcitrante -que no digo que no sea REAL como la vida misma-; me puede la rivalidad insana, dejarse en evidencia o inlcuso en ridículo, rebajarse hasta límites insospechados... Me puede. Quizá tendría que cambiar la perspectiva, el chip, la mirada o la sensación, pero reconozco que es algo un poco complicado de digerir. Si nos quedamos en la superficie, entonces bien; es simple y hasta puede tener un punto divertido. Pero reconozco que como mujer, me resulta duro. Que se ha trabajado mucho y duro para que podamos estar donde estámos, para que seamos LIBRES e INDEPENDIENTES.

Pero bueno. Tampoco otros realitys ni otros programas, a veces ni siquiera el telediario son dignos de prestarles atención. Y es que me preocupa mucho que, mientras avanzamos tecnológica y socialmente, los valores retroceden a una velocidad vertiginosa. Que la educación (en conjunto) cada vez tiene menos importancia, que la violencia se asienta como una realidad permanente y diaria, que nos acostumbramos a las injusticias del mundo, que nos olvidamos del que tenemos al lado porque ya tenemos bastante con lo nuestro, que ya tenemos casi cinco millones de parados...

Nuevas elecciones.
Sinceramente, me importa poco el color del que manda y mangonea... (perdonadme si eso); lo que debería importarnos habría de ser que, de verdad, alguien se preocupara por las necesidades reales del pueblo, las necesidades de las familias que tienen verdaderos problemas, las necesidades de quien quiere estudiar y no puede, las necesidades de medioambiente, las necesidades de opciones de ocio limpio... Y que no sigamos oyendo que todo es política y que si no interesa económicamente, no es viable.

Bueeeeeeeeeeeeeeeeeno,
viernes especial;
no sé porqué estoy tan reivindicativa...

...pero os lleno de besos desobedientes... ;-D





Orgulloso de estar entre el proletariado
es difícil llegar a fin de mes
y tener que sudar y sudar
"pa" ganar nuestro pan.

Éste es mi sitio, ésta es mi gente
somos obreros, la clase preferente
por eso, hermano proletario, con orgullo
yo te canto esta canción, somos la revolución.

¡SI SEÑOR! La revolución,
¡SI SEÑOR!, ¡SI SEÑOR!, somos la revolución,
tu enemigo es el patrón,
¡SI SEÑOR!, ¡SI SEÑOR!, somos la revolución,
viva la revolución.

"Estyhasta" los cojones de aguantar a sanguijuelas,
los que me roban mi dignidad.
Mi vida se consume soportando esta rutina
que me ahoga cada día más.

Feliz el empresario, más callos en mis manos
mis riñones van a reventar.
No tengo un puto duro, pero sigo cotizando
a tu estado del bienestar.

¡RESISTENCIA!
Éste es mi sitio...

En esta democracia hay mucho listo que se lucra
exprimiendo a nuestra clase social.
Les importa cuatro huevos si tienes catorce hijos
y la abuela no se puede operar.

Somos los obreros, la base de este juego
en el que siempre pierde el mismo "pringao",
un juego bien pensado, en el que nos tienen callados
y te joden si no quieres jugar.

¡RESISTENCIA!
¡DES-O-BE-DIEN-CIA!

martes, 25 de octubre de 2011

** DE MAGIA

...Y como la vida sigue, hoy un anuncio lleno de ternura y de simpatía y que transmite, de algún modo, ese amor que padres y madres desean transmitir a sus hij@s. Y transmite, también, la magia que todos deberíamos intentar ofrecer en nuestro día a día...

lunes, 24 de octubre de 2011

**SIMONCELLI (D.E.P)


Supongo que es casi obligado, para quienes amamos el deporte (en general), hacer un pequeño y sentido homenaje a Simoncelli, un jóven aunque experto piloto de motos de 24 años, que murió ayer en el circuito de Sepang. Bien es cierto que murió haciendo lo que más le gustaba y que su forma de conducir, en muchas ocasiones temeraria y peligrosa, hacía de él un piloto no siempre querido por el resto de corredores. Pero no deja de ser una tragedia que, de alguna forma, nos debe llevar a reflexionar en diferentes direcciones; en lo efímero de este paseo por lo terrenal, en la importancia de disfrutar mucho y bien de las cosas pequeñitas, en que siempre hay algo más importante de lo que preocuparnos...

Vaya desde este humilde rincón, un pésame para la familia de las motos.
Y para todos los que hemos perdido a gente muy querida...

jueves, 20 de octubre de 2011

**LA HISTORIA, A PASITOS...


No puedo por menos que alegrarme y emocionarme por la noticia del fin de ETA.
Con cautela, de momento, pero sobre todo con esperanza e ilusión.
Sin duda, un momento histórico.
Sin duda, un momento maravilloso.

miércoles, 19 de octubre de 2011

** AMISTAD ;-)



 Amistad entre mujeres:
Una noche, una mujer no llegó a dormir a su casa.
Al día siguiente le dijo a su marido que se había quedado a dormir en casa de una amiga.
El hombre llamó a las 10 mejores amigas de su mujer:
ninguna de ellas sabía nada al respecto.
 
Amistad entre hombres:
Una noche, un hombre no llegó a dormir a su casa,
al día siguiente le dijo a su mujer que se había quedado a dormir en casa de un amigo.
La mujer llamó a los 10 mejores amigos de su marido:
8 confirmaron que se quedó a dormir en su casa,
y 2 aseguraron que aún se encontraba allí.
¡ Eso es amistad, coño !

lunes, 17 de octubre de 2011

Pues eso...


aaarrrffff, estoy volviendo.
Como casi todos los días, últimamente.
Besos,
mis chicos...

martes, 11 de octubre de 2011

**21 DÍAS SIN QUEJAS

Encontrado por la red, me ha encantado.
Otro ratito hablaremos del famoso:
"un, dos, tres,
cuatro, cinco, seis;
yo me calmaré,
todos lo veréis"
;-D

Trabaja para conseguir la felicidad: centra la atención en lo que quieres en lugar de en lo que no te gusta.


21 días es el tiempo que necesita el cerebro para adoptar un nuevo hábito. Usa una pulsera y cámbiala de muñeca cada vez que te quejes. Para dejar de ser víctima y centrar la atención en lo que quieres en lugar de en lo que no te gusta.

Me pelo de frío. Me aso de calor. No me gustan los domingos. Odio los lunes. Qué asco de tráfico. Está lleno de bichos. Me duele la cabeza. Ya se ha vuelto a quedar colgado el ordenador. Cuánta gente. Le falta sal. Está demasiado salado. Qué lento. Qué sucio. Qué caro. Qué feo… Si se pusieran sobre el papel, el diccionario de las quejas cotidianas de la mayoría de nosotros probablemente sería más voluminoso que Guerra y Paz. 

Solemos prodigarnos de tal forma con las lamentaciones y los chismorreos que erradicarlos del día a día puede convertirse en un auténtico reto personal. Esto es lo que propuso a sus alumnos Xabier Satrústegui “Soma”, director de la escuela de YOGA Wiryth. Lo hizo en 2009 y, según señala, muchos de ellos continúan hoy intentándolo. “Todo el mundo creía que lo superaría fácilmente, pero no fue así. Lo consiguieron muy pocos y al cabo de varios meses. Es muy divertido y nos permite percatarnos de muchas cosas de las que no éramos conscientes”, dice.

La idea original nació de la mano de Will Bowen, un pastor estadounidense que, en sus sermones, proponía a sus protestones feligreses permanecer 21 días sin quejarse. Para facilitarles la cosa, repartió una pulsera morada que debían cambiarse de muñeca cada vez que se lamentasen de algo, para poner el contador a cero y empezar otra vez. De la iniciativa surgió un súper-ventas y un movimiento con miles de seguidores en todo el mundo.


Quejarse está a la orden del día entre todos los sectores de la sociedad, y no sólo en tiempos de crisis como los que vivimos. La costumbre nacional de criticar y descalificar en la sobremesa o en el bar, en lugar de actuar y pasar a la acción contribuye a crear un ambiente de negatividad en el que es fácil sentirse una víctima impotente ante todo lo que acontece.

La realidad es que con cada queja hacemos que el problema crezca. Satrústegui lo expresa poéticamente: “Lo mismo que la nieve sólo se derrite cuando el sol aparece, sólo evolucionas cuando, ante lo que odias, hagas que el amor esté presente”.

¿Por qué 21 días? Dicen los psicólogos que un hábito se forma en este periodo de tiempo. Pero lo más probable es que deshacer el hábito del chismorreo y la queja te lleve bastante más. A los alumnos más veloces les llevó cinco meses, pero quizá tú puedas batir ese récord. Eso sí, ya que no hay nadie espiándote por encima del hombro, debes ser muy sincero contigo mismo. Como apunta Satrústegui, es más efectivo alcanzar la meta en cinco años de forma sincera que en cinco meses con mentirijillas.

 
Antes de subir al carro, un apunte que hace el reto más cómodo: si pasa por tu cabeza pero no llegas a expresarlo, no cuenta. Sólo sirven las quejas exteriorizadas; de otra forma, ni Santa Teresa pasaría la prueba. Esta es una buena oportunidad para frenar y no dejar que la lengua vaya por delante del pensamiento. La idea es que, al cabo de tres semanas sin criticar ni quejarte, también dejarás de hacerlo mentalmente. 

“La vida se transforma a tu alrededor cuando adquieres el hábito de no quejarte, criticar, chismorrear o victimizarte. El paraíso comienza a crearse en tu entorno, el entusiasmo florece, el sufrimiento desaparece, la autoestima crece y la felicidad amanece”, dice Satrústegui. Ahí es nada.


lunes, 10 de octubre de 2011

**EMMANUEL EN FACTOR X

No es que hoy tuviera el día especialmente sensible, pero cuando una se topa con testimonios así, es difícil no santirse tocadA de algún modo. Así que, aunque no es del todo apto para corazones llorones -a ver cómo recupero esta cara ahora ;-D-, os dejo este vídeo maravilloso; por una vez, los medios de comunicación crean en positivo.

Y sí, la verdad es que en muchas, en muchísimas ocasiones, nos preocupamos por cosas muy poco importantes...




PD: Estoy pendiente de que me confirmen un curso por el Norte, así que por si acaso, os cuento que esta semana, que tiene una fiestecilla en medio, sólo trabajaré lunes (10) y martes (11). Y después me reengancharé el martes día 18. ¡¡¡Mil besos!!!

viernes, 7 de octubre de 2011

**JOBS (Y II)

Hoy casi todo el mundo habla de Jobs; sin duda, se ha ido un personaje del siglo XXI, un sabio, un aventurero visionario. Tremendamente inteligente (la inteligencia, dicho sea de paso, me apasiona, me pone, me excita, me atrae...). Un hombre especial. La inteligencia es un don y como tal, no sólo hay que dar gracias por poseerla sino que además hay que cultivarla.Y compartirla. 


Decía (mos ayer) que hoy todas las tertulias matinales ofrecían sus propias opiniones (y lineas editoriales) al respecto; en un zapeo tontorrón, me he encontrado con un periodista de cierto renombre y que hasta la fecha lo consideraba una persona bastante sensible y culta, cuestionando a Jobs en tanto parecía que hacía apología de la ignorancia.  Porque como él mismo confiesa, nunca había ido a la universidad. Y sin embargo...

...sin embargo ¡¡menudo éxito!! Menudo cerebro privilegiado en constante movimiento, en constante creación. Menuda persona increíble, importante en nuestra vida -sin apenas ser conscientes-, ¡¡menudo regalo!! No sólo por su aportación al avance tecnológico -soporte de la era moderna-, sino por lecciones de humanidad y de sabiduría que no estaría de más tener en cuenta cada cierto tiempo. Me voy a poner el discurso de Stanford en mi armario o en el corcho de mi cocina (listas, fotos, poesías, recuerdos, dinámicas....). Así tendré un poco más a mano esas frases llenas de vida.


Y ¡qué queréis que os diga! Desde luego, el saber no ocupa lugar y de hecho creo que es maravilloso tener acceso a la cultura y a estudios reglados, del nivel que sea. Es un lujo que pasamos por alto y que obviamos sin darle la importancia que tiene. Pero también es verdad que hay mucha gente con estudios superiores, con estudios estupendos y acabados con un buen nivel, que no puede acceder a un puesto de trabajo acorde con su formación. O que incluso no puede acceder a trabajos de menor nivel o remuneración por estar "demasiado" cualificado. Así que todo depende de muchos factores, como para todo en la vida. Y creo que Jobs disfrutó de la generosidad de su inteligencia.

Como apuntaba Daniel Casares ayer, "la historia (de Jobs) es para releerla y releerla una y otra vez... y es que el mundo necesita gente que ame lo que hace, sí señor". Esa es la clave, amar lo que se hace, amar nuestra profesión, la que sea; despertar nuestra creatividad, relativizar, disfrutar, gozar. Y aprender de los obstáculos para hacernos todavía más grandes. Ser positivos, optimistas, dejar fluir el buen humor. Que bien es cierto que nos sobran razones para disgustarnos en la vida, pero también nos sobran razones para ser felices. Y casi siempre nos cuesta más verlas.

Me encanta aprender, crecer, saborear las mieles de la locura.
Me encanta  la gente que me cuestiona, que me anima, que me sugiere.
Me encanta la vida de la vida, la luz, la magia....
Me encantas tú.



"...a fuego lento me haces agua,
contigo tengo el alma enamorada,
me llenas 
me vacías, 
me desarmas, 
¡ay, ay, ay amor!, 
cuando me amas..."

jueves, 6 de octubre de 2011

**CÉLEBRE DISCURSO DE STEVE JOBS

Emotivo, tierno, inteligente, sabio...

Discurso de Steve Jobs en la Universidad de  Stanford 2005

Gracias.

Tengo el honor de estar hoy aquí con vosotros en vuestro comienzo en una de las mejores universidades del mundo. La verdad sea dicha, yo nunca me gradué. A decir verdad, esto es lo más cerca que jamás he estado de una graduación universitaria.

Hoy os quiero contar tres historias de mi vida. Nada especial. Sólo tres historias.

La primera historia versa sobre “conectar los puntos”.

Dejé la Universidad de Reed tras los seis primeros meses, pero después seguí vagando por allí otros 18 meses, más o menos, antes de dejarlo del todo. Entonces, ¿por qué lo dejé? Comenzó antes de que yo naciera. Mi madre biológica era una estudiante joven y soltera, y decidió darme en adopción. Ella tenía muy claro que quienes me adoptaran tendrían que ser titulados universitarios, de modo que todo se preparó para que fuese adoptado al nacer por un abogado y su mujer. Solo que cuando yo nací decidieron en el último momento que lo que de verdad querían era una niña. Así que mis padres, que estaban en lista de espera, recibieron una llamada a medianoche preguntando:

“Tenemos un niño no esperado; ¿lo queréis?”
“Por supuesto”, dijeron ellos.


Mi madre biológica se enteró de que mi madre no tenía titulación universitaria, y que mi padre ni siquiera había terminado el bachillerato, así que se negó a firmar los documentos de adopción. Sólo cedió, meses más tarde, cuando mis padres prometieron que algún día yo iría a la universidad. Y 17 años más tarde fui a la universidad. Pero de forma descuidada elegí una universidad que era casi tan cara como Stanford, y todos los ahorros de mis padres, de clase trabajadora, los estaba gastando en mi matrícula. Después de seis meses, no le veía propósito alguno. No tenía idea de qué quería hacer con mi vida, y menos aún de cómo la universidad me iba a ayudar a averiguarlo. Y me estaba gastando todos los ahorros que mis padres habían conseguido a lo largo de su vida. Así que decidí dejarlo, y confiar en que las cosas saldrían bien. En su momento me dio miedo, pero en retrospectiva fue una de las mejores decisiones que nunca haya tomado.



En el momento en que lo dejé, ya no fui más a las clases obligatorias que no me interesaban y comencé a meterme en las que parecían interesantes. No era idílico. No tenía dormitorio, así que dormía en el suelo de las habitaciones de mis amigos, devolvía botellas de Coca Cola por los 5 céntimos del envase para conseguir dinero para comer, y caminaba más de 10 Km los domingos por la noche para comer bien una vez por semana en el templo de los Hare Krishna. Me encantaba. Y muchas cosas con las que me fui topando al seguir mi curiosidad e intuición resultaron no tener precio más adelante.

Os daré un ejemplo.

En aquella época la Universidad de Reed ofrecía la que quizá fuese la mejor formación en caligrafía del país. En todas partes del campus, todos los póster, todas las etiquetas de todos los cajones, estaban bellamente caligrafiadas a mano. Como ya no estaba matriculado y no tenía clases obligatorias, decidí atender al curso de caligrafía para aprender cómo se hacía. Aprendí cosas sobre el serif y tipografías sans serif, sobre los espacios variables entre letras, sobre qué hace realmente grande a una gran tipografía.


Era sutilmente bello, histórica y artísticamente, de una forma que la ciencia no puede capturar, y lo encontré fascinante. Nada de esto tenía ni la más mínima esperanza de aplicación práctica en mi vida. Pero diez años más tarde, cuando estábamos diseñando el primer ordenador Macintosh, todo eso volvió a mí. Y diseñamos el Mac con eso en su esencia. Fue el primer ordenador con tipografías bellas. Si nunca me hubiera dejado caer por aquél curso concreto en la universidad, el Mac jamás habría tenido múltiples tipografías, ni caracteres con espaciado proporcional. Y como Windows no hizo más que copiar el Mac, es probable que ningún ordenador personal los tuviera ahora. Si nunca hubiera decidido dejarlo, no habría entrado en esa clase de caligrafía y los ordenadores personales no tendrían la maravillosa tipografía que poseen.
Por supuesto, era imposible conectar los puntos mirando hacia el futuro cuando estaba en clase, pero fue muy, muy claro al mirar atrás diez años más tarde.


Lo diré otra vez: no puedes conectar los puntos hacia adelante, sólo puedes hacerlo hacia atrás. Así que tenéis que confiar en que los puntos se conectarán alguna vez en el futuro. Tienes que confiar en algo, tu instinto, el destino, la vida, el karma, lo que sea. Esta forma de actuar nunca me ha dejado tirado, y ha marcado la diferencia en mi vida.
 
Mi segunda historia es sobre el amor y la pérdida.

Tuve suerte — supe pronto en mi vida qué era lo que más deseaba hacer. Woz y yo creamos Apple en la cochera de mis padres cuando tenía 20 años. Trabajamos mucho, y en diez años Apple creció de ser sólo nosotros dos a ser una compañía valorada en 2 mil millones de dólares y 4.000 empleados. Hacía justo un año que habíamos lanzado nuestra mejor creación — el Macintosh — un año antes, y hacía poco que había cumplido los 30.

Y me despidieron. ¿Cómo te pueden echar de la empresa que tú has creado?

Bueno, mientras Apple crecía contratamos a alguien que yo creía muy capacitado para llevar la compañía junto a mí, y durante el primer año, más o menos, las cosas fueron bien. Pero luego nuestra perspectiva del futuro comenzó a ser distinta y finalmente nos apartamos completamente. Cuando eso pasó, nuestra Junta Directiva se puso de su parte.


Así que a los 30 estaba fuera. Y de forma muy notoria. Lo que había sido el centro de toda mi vida adulta se había ido y fue devastador. Realmente no supe qué hacer durante algunos meses. Sentía que había dado de lado a la anterior generación de emprendedores, que había soltado el testigo en el momento en que me lo pasaban. Me reuní con David Packard [de HP] y Bob Noyce [Intel], e intenté disculparme por haberlo fastidiado tanto. Fue un fracaso muy notorio, e incluso pensé en huir del valle [Silicon Valley].

Pero algo comenzó a abrirse paso en mí — aún amaba lo que hacía. El resultado de los acontecimientos en Apple no había cambiado eso ni un ápice. Había sido rechazado, pero aún estaba enamorado. Así que decidí comenzar de nuevo. No lo vi así entonces, pero resultó ser que el que me echaran de Apple fue lo mejor que jamás me pudo haber pasado.


Había cambiado el peso del éxito por la ligereza de ser de nuevo un principiante, menos seguro de las cosas. Me liberó para entrar en uno de los periodos más creativos de mi vida. Durante los siguientes cinco años, creé una empresa llamada NeXT, otra llamada Pixar, y me enamoré de una mujer asombrosa que se convertiría después en mi esposa.

Pixar llegó a crear el primer largometraje animado por ordenador, Toy Story, y es ahora el estudio de animación más exitoso del mundo. En un notable giro de los acontecimientos, Apple compró NeXT, yo regresé a Apple y la tecnología que desarrollamos en NeXT es el corazón del actual renacimiento de Apple. Y Laurene y yo tenemos una maravillosa familia.


Estoy bastante seguro de que nada de esto habría ocurrido si no me hubieran echado de Apple. Creo que fue una medicina horrible, pero supongo que el paciente la necesitaba. A veces, la vida te da en la cabeza con un ladrillo. No perdáis la fe. Estoy convencido de que la única cosa que me mantuvo en marcha fue mi amor por lo que hacía. Tenéis que encontrar qué es lo que amáis. Y esto vale tanto para vuestro trabajo como para vuestros amantes.

El trabajo va a llenar gran parte de vuestra vida, y la única forma de estar realmente satisfecho es hacer lo que consideréis un trabajo genial. Y la única forma de tener un trabajo genial es amar lo que hagáis. Si aún no lo habéis encontrado, seguid buscando.

No os conforméis.

Como en todo lo que tiene que ver con el corazón, lo sabréis cuando lo hayáis encontrado. Y como en todas las relaciones geniales, las cosas mejoran y mejoran según pasan los años. Así que seguid buscando hasta que lo encontréis.

No os conforméis.


Mi tercera historia es sobre la muerte.

Cuando tenía 17 años, leí una cita que decía algo como: “Si vives cada día como si fuera el último, algún día tendrás razón”. Me marcó, y desde entonces, durante los últimos 33 años, cada mañana me he mirado en el espejo y me he preguntado: “Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy?” Y si la respuesta era “No” durante demasiados días seguidos, sabía que necesitaba cambiar algo.
Recordar que voy a morir pronto es la herramienta más importante que haya encontrado para ayudarme a tomar las grandes decisiones de mi vida.

Porque prácticamente todo, las expectativas de los demás, el orgullo, el miedo al ridículo o al fracaso se desvanece frente a la muerte, dejando sólo lo que es verdaderamente importante.Recordar que vas a morir es la mejor forma que conozco de evitar la trampa de pensar que tienes algo que perder. Ya estás desnudo. No hay razón para no seguir a tu corazón.


Hace casi un año me diagnosticaron cáncer.

Me hicieron un chequeo a las 7:30 de la mañana, y mostraba claramente un tumor en el páncreas. Ni siquiera sabía qué era el páncreas. Los médicos me dijeron que era prácticamente seguro un tipo de cáncer incurable y que mi esperanza de vida sería de tres a seis meses. Mi médico me aconsejó que me fuese a casa y dejara zanjados mis asuntos, forma médica de decir: prepárate a morir.

Significa intentar decirle a tus hijos en unos pocos meses lo que ibas a decirles en diez años. Significa asegurarte de que todo queda atado y bien atado, para que sea tan fácil como sea posible para tu familia. Significa decir adiós.

Viví todo un día con ese diagnóstico.

Luego, a última hora de la tarde, me hicieron una biopsia, metiéndome un endoscopio por la garganta, a través del estómago y el duodeno, pincharon el páncreas con una aguja para obtener algunas células del tumor. Yo estaba sedado, pero mi esposa, que estaba allí, me dijo que cuando vio las células al microscopio el médico comenzó a llorar porque resultó ser una forma muy rara de cáncer pancreático que se puede curar con cirugía.

Me operaron, y ahora estoy bien. Esto es lo más cerca que he estado de la muerte, y espero que sea lo más cerca que esté de ella durante algunas décadas más. Habiendo vivido esto, ahora os puedo decir esto con más certeza que cuando la muerte era un concepto útil, pero puramente intelectual:

Nadie quiere morir.


Ni siquiera la gente que quiere ir al cielo quiere morir para llegar allí. Y sin embargo la muerte es el destino que todos compartimos. Nadie ha escapado de ella. Y así tiene que ser, porque la Muerte es posiblemente el mejor invento de la Vida. Es el agente de cambio de la Vida. Retira lo viejo para hacer sitio a lo nuevo. Ahora mismo lo nuevo sois vosotros, pero dentro de no demasiado tiempo, de forma gradual, os iréis convirtiendo en lo viejo, y seréis apartados. Siento ser tan dramático, pero es bastante cierto. Vuestro tiempo es limitado, así que no lo gastéis viviendo la vida de otro.

No os dejéis atrapar por el dogma que es vivir según los resultados del pensamiento de otros. No dejéis que el ruido de las opiniones de los demás ahogue vuestra propia voz interior. Y lo más importante, tened el coraje de seguir a vuestro corazón y vuestra intuición. De algún modo ellos ya saben lo que tú realmente quieres ser. Todo lo demás es secundario.



Cuando era joven, había una publicación asombrosa llamada The Whole Earth Catalog [Catálogo de toda la Tierra], una de las biblias de mi generación. La creó un tipo llamado Stewart Brand no lejos de aquí, en Menlo Park y la trajo a la vida con su toque poético. Eran los últimos años 60, antes de los ordenadores personales y la autoedición, así que se hacía con máquinas de escribir, tijeras, y cámaras Polaroid. Era como Google con tapas de cartulina, 35 años de que llegara Google, era idealista, y rebosaba de herramientas claras y grandes conceptos. Stewart y su equipo sacaron varios números del The Whole Earth Catalog, y cuando llegó su momento, sacaron un último número.

Fue a mediados de los 70, y yo tenía vuestra edad.

En la contraportada de su último número había una fotografía de una carretera por el campo a primera hora de la mañana, la clase de carretera en la que podrías encontrarte haciendo autoestop si sois aventureros. Bajo ella estaban las palabras:

“Sigue hambriento. Sigue alocado”.

Era su último mensaje de despedida. Sigue hambriento. Sigue alocado.
Y siempre he deseado eso para mí. Y ahora, cuando os graduáis para comenzar de nuevo, os deseo eso a vosotros.

Seguid hambrientos. Seguid alocados.
Muchísimas gracias a todos.

miércoles, 5 de octubre de 2011

**VIEJITO....PERO AÚN TIENE UN MENSAJE PARA ESCUCHAR

De otras cosas...


La modelos es: Tara Lynn
Esta foto salió publicada en la revista Elle France el 26 de marzo de 2010
El autor de la fotografía es David Oldham
La usamos para ilustrar esta anécdota porque nos parece una bellísima fotografía.

Sirena o ballena?

Hace algún tiempo a la entrada de un gimnasio se podía ver un cartel con la foto de una chica de físico espectacular con escrito: "este verano, quieres ser sirena o ballena?"

Se cuenta que una mujer, de la que no conocemos su aspecto físico, respondió a esta pregunta de la siguiente manera:

Estimados señores, las ballenas están siempre rodeadas de amigos (delfines, focas, humanos curiosos), tienen una vida sexual muy activa y crían a sus pequeños con mucho cariño. Se divierten como locas con los delfines y comen gambas hasta empacharse. Nadan todo el día y viajan hasta lugares fantásticos como la Patagonia, el mar de Barens o las barreras coralinas de Polinesia.

Cantan estupendamente y algunas veces hasta graban cds. Son animales impresionantes y muy queridos, a los que se defiende y admira en todo el mundo.






Las sirenas no existen.

Pero si existieran harían cola en la consulta del psicólogo debido a un problema de desdoblamiento de la personalidad, mujer o pescado?

No tendrían vida sexual y no podrían tener hijos.
Serian graciosas, es cierto, pero solitarias y tristes.
Y además, quien querría a su lado una chica que huele a pescado?

Sin lugar a dudas, yo prefiero ser una ballena.






En una época en la que los medios de comunicación nos meten en la cabeza que solo las delgadas son bellas, yo -sinceramente- prefiero comerme un helado con mis hijos, cenar en buena compañía para después quemar calorías al calor de la alcoba y comer y beber y divertirme con mis amigas.

Y vosotr@s?


(...)

Y ESTO, un regalo de alguien que también es una poderosa bruja; pasional, férrea, sabia, auténtica, cercana e imprescindible en mi vida.
¡¡Gracias por todo!!




Como es que te amo asi con todo el pensamiento
Como lograste entrar asi sin preguntar robandote el momento
Como es que te amo asi
sin tanto sufrimiento
Como es que es natural que cada amanecer quiero parar el tiempo
Y es que te he dado todo y nada es suficiente
no porque me lo pidas sino porque faltan frenos al quererte..hooooo

Que precio tiene el cielo que alguien me lo diga

Que mas que darte amor yo quiero regalarte el azul de los dias
Que precio tiene el cielo que alguien me lo diga
si yo con esta historia siento que la gloria ha llegado a mi vida
Que precio tiene el cielo que alguien me lo diga
yo pago con mi alma sin temor a nada.
Yo te doy mi vida

Esta noche te doy de todo cuanto tengo

y no me doy a basto como imaginar que mundo yo te invento
Y desde aqui se ven las nubes y los vientos por eso aqui te traje porque por lo pronto es todo lo que tengo
Y es que te he dado todo y nada es suficiento no por que me lo pides sino porque faltan frenos al quererte.

Que precio tiene el cielo que alguien me lo diga

que mas que darte amor yo quiero regalarte el azul de los dias
Que precio tiene el cielo que alguien me lo diga
si yo con esta historia siento que la gloria a llegado a mi vida
que precio tiene el cielo que alguien me lo diga
yo pago con mi alma sin temor a nada
yo te doy mi vida
eternamente yo te inventaria como esta tantas otras melodias para no faltarte si te falto un dia

que precio tiene, dime que precio tiene ,tiene....

quiero regalarte el azul de los dias la luna los mares mi vida
que precio tiene, dime que precio tiene ,tiene
y es que te he dado de todo y nada es suficiente
que precio tiene, dime que precio tiene ,tiene
oye mama te lo voy a dar con mi alma lo voy a pagar...