Tengo un amigo que está empezando una nueva vida. Y es curioso cómo se ven las cosas cuándo miramos con ojos nuevos, con sueños renovados. Aunque sean las mismas cosas de siempre; de repente hay matices, hay luces, hay colores y olores que se nos habían pasado por alto. De repente hay gente que se hace presente y otra que desaparece. De repente...
En realidad a casi todos nos toca empezar una nueva vida alguna vez que otra; es deseable y creo que bastante sano, al menos tal y como entiendo yo el camino. Si no, quizá quiere decir que nos hemos atrincherado en la monotonía. Que tampoco está mal, oigausted. Cada cual ha de responder a sus necesidades con sus herramientas, con las mejores de las intenciones y la más grande de las alegrías (irse a dormir al sofá quizá despeje dudas pero no creo que sea una solución muy saludable... ;-DDDDD).
Sea como fuere, es impresionante ver avanzar a alguien al que se le presentan dificultades; es impresionante la fuerza, la entereza, las ganas de vivir. Es impresionante -y admirable, dicho sea de paso-, la ternura renovada que se respira alrededor y junto a la persona que decide volver a empezar. O que necesita volver a empezar. Y no importa las veces que se intente, no importa las veces que se pierda la esperanza; lo que de verdad importa es la pasión que se imprime a cada una de esas metas pequeñitas que van apareciendo. Y la locura amorosa que nos inventamos para salir a flote. Tantas veces como sea necesario.
Es bueno recordarnos, de vez en cuando, qué queremos conseguir, qué sueños siguen sin cumplirse; es bueno recordarnos cuándo perdimos oportunidades que resultaron determinantes (asierinadas, ¡juas!), cuándo amamos sin pedir nada a cambio, cuándo perdimos los papeles, cuándo fuimos generosos, cuándo nos olvidamos de jugar...
...es bueno recordarnos.
Así, sin más disfraces.
1 comentario:
Señorita ternura...
Ramadán Kareem, generoso.
Ramadán Mubarak, feliz... que la Luz ilumine tu hogar y tu corazón.
Que la generosidad de tu alma brille más que nunca en estos días.
Prósperidad,Salud y muchos sueños para cumplir...
Con cariño, un millón de besos
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